En esta etapa de pandemia tan difícil que estamos atravesando, seguramente habrás oído continuamente en medios de comunicación una serie de recomendaciones para evitar en la medida de lo posible la infección por coronavirus. Entre ellas, probablemente la más repetida sea lavarse las manos frecuentemente, es decir, mantener una buena higiene. Y organizaciones como la OMS, o el propio gobierno, nos insisten en que lo hagamos con jabón como medida más eficaz que ninguna otra.
¿Pero por qué con jabón?¿Cómo actúa contra el coronavirus?
Desde tiempos inmemoriales, el jabón ha sido la base de la higiene personal, además de usarse con fines curativos como describía en el siglo II el médico Galeno. Elaborado primero con grasas animales, posteriormente comenzó a usarse el aceite como elemento principal. Se produce mezclando un ácido (grasas o aceites) con una base (sosa o potasa) en un medio acuoso, obteniéndose una sal sódica o potásica de ácidos grasos por medio del proceso de la saponificación, en el que además obtenemos glicerina de manera natural.
El jabón, por su estructura química, cuenta con una parte hidrófila (que tiene afinidad por el agua) y otra hidrófoba (afín a la grasa). Al usar el jabón, esta parte hidrófoba encapsula la grasa y el aclarado con agua arrastra la suciedad.
Es en este punto donde encontramos la relación entre nuestros jabones y el dichoso coronavirus. Este virus, al igual que los demás, cuenta con un núcleo de material genético por el que se multiplica, así como unas protenas externas, y protegiendo todo esto encontramos una envoltura de grasa. Al usar el jabón, como hemos visto antes, se disuelve esta capa grasa que protege al virus, y una vez que ya no cuenta con ella, pierde la capacidad de adherirse e infectar.
El proceso correcto para un buen lavado de manos podemos verlo en el siguiente gráfico:
Nuestra empresa dispone de una amplia gama de jabones tanto sólidos como líquidos elaborados artesanalmente y curados durante 40 días, adaptados a todo tipo de piel y con distintas cualidades en función de los aceites que usemos además de, por supuesto, el aceite de oliva virgen extra de nuestra tierra, que es la base del producto y supone más de la mitad de su composición, por lo que además de limpiar deja una agradable sensación de suavidad y nutrición. ENCUENTRA EL QUE MÁS TE GUSTE AQUÍ.
Pero si no disponemos de agua, siempre podemos llevar en el bolsillo un gel hidroalcohólico, que también disuelve gracias al alcohol esta capa grasa.
En Arahí disponemos de un gel único formulado con aceite de oliva virgen extra y 65% de alcohol etílico, glicerina vegetal y aceite esencial de lavanda, que además de dejarte en las manos una sensación de limpieza gracias a su peculiar olor, ayuda a la desinfección puesto que la lavanda es un antiséptico natural. No sólo elimina virus y bacterias, sino que nutre e hidrata las manos, por lo que es un producto de higiene y de cosmética, Y PUEDES ENCONTRARLO AQUÍ. El modo de uso es como sigue:
Y recuerda, todos nuestros productos están hechos artesanalmente con materia prima de la zona y aceite de oliva virgen extra de Montilla.