Hoy queremos hablaros sobre la aromaterapia, una terapia alternativa que postula efectos beneficiosos sobre el organismo humano por la percepción de los olores de determinados aceites esenciales (Wikipedia).
Los beneficios de la aromaterapia
La aromaterapia es muy beneficiosa y no tiene efectos secundarios. Se pueden aplicar los aceites mediante masajes, baños aromáticos o como cataplasma. Para uso interno debemos consultar con un especialista
Características de la aromaterapia
Esta terapia alternativa que usa diferentes aromas y aceites, los cuáles se inhalan, se ingieren o se añaden al agua del baño, promoviendo el bienestar físico y psicológico. Se puede usar la aromaterapia junto a otras técnicas para un enfoque más holístico de cualquier tratamiento o para “ayudar” a la medicina moderna.
Si bien la aromaterapia “se ha puesto de moda” en Occidente desde hace algún tiempo, lo cierto es que no es una práctica para nada nueva en Oriente. Se utilizaba ya en el año 4500 A.C en China. También se dice que los antiguos egipcios usaban aceites esenciales para embalsamar y con fines terapéuticos. En Grecia, los médicos como Galeno o Hipócrates aprovechaban las ventajas de las hierbas aromáticas para tratar a sus pacientes. En la Edad Media en Europa, se utilizaban para combatir enfermedades y durante el Renacimiento es sabido que la Reina Isabel I (de Inglaterra) apoyaba su uso.
La aromaterapia “médica”, estudiada desde el punto de vista de la química o la farmacología de los aceites esenciales es bastante reciente pero con muchos adeptos en todo el mundo. Y hasta en Reino Unido o Francia se ha incorporado a la cartilla de medicina “oficial”.
Los aceites se pueden aplicar de diferentes maneras:
- Por inhalación: es el método básico en la aromaterapia, puede ser directa o no (mezclando con agua por ejemplo). También pueden emplearse difusores o vapor. Esta alternativa es para problemas en el aparato respiratorio o para algunas condiciones en la piel.
- Por masaje: se diluyen en alguna loción o agua y se realiza el masaje de forma enérgica o suave, según la dolencia. Ideal para contracturas.
- Como baños aromáticos: se llena la tina de agua caliente y se echan algunas gotas de aceites. Luego se alterna con agua tibia. Para la circulación y la relajación.
- Como cataplasmas (calientes o frías): para afecciones en la piel o problemas musculares.
- Uso interno: sólo indicado en algunos casos y con ciertos aceites. No se debe consumir sin aval de un profesional.
Aceites esenciales y aromaterapia: para qué sirve cada uno
El siguiente listado te ofrece los principales aceites que se utilizan en las técnicas de aromaterapia y cuáles son sus propiedades curativas:
- Bergamota: es estimulante, revitalizador, energético y refrescante. Se utiliza para aliviar el estrés, la depresión y la ansiedad y restablecer el apetito.
- Ciprés: sedante, vigorizante y purificador. Calma el sistema nervioso, reduce los síntomas de la menopausia, el estrés y las alergias.
- Geranio: equilibrante y estimulante. Alivia los síntomas de la menstruación, la depresión y la angustia. Levanta el ánimo y calma el sistema nervioso.
- Jengibre: favorece la circulación, es relajante, ayuda a prevenir mareos y náuseas en un viaje, alivia los problemas digestivos, mejora la circulación de la sangre y estimula el sistema inmunológico, además de tratar gripe y resfriados.
- Pomelo: es estimulante, equilibrante emocional y purificante. Permite regular la emociones como la ira, aliviar el estrés y combatir problemas respiratorios tales como el resfrío.
- Lavanda: es armonizador, purificante, equilibrante, sedante y relajante. Alivia los dolores de cabeza producto de la tensión o estrés, regula la presión arterial alta, es sedante para las mujeres parturientas y alivia quemaduras y picaduras de insectos.
- Limón: estimulante, refrescante y purificante. Alivia el estrés, reduce el cansancio mental, mejora la circulación sanguínea.
- Menta: antiséptica, descongestionante y digestiva. Es eficaz para tratar la gripe, relaja y calma los músculos del estómago y del tracto gastrointestinal, así como los trastornos nerviosos.
- Sándalo: es descongestionante, afrodisíaco, equilibrante, relajante y purificante. Alivia problemas emocionales, calma el sistema nervioso, equilibra la mente, el espíritu y el cuerpo, prepara para la meditación.
- Romero: es estimulante. Alivia dolores reumáticos y musculares, ayuda a los que padecen presión arterial baja. También aumenta la circulación de la sangre hacia el cerebro.
- Ylang Ylang: afrodisíaco, vigorizador, purificante, equilibrante, euforizante y calmante. Es eficaz para problemas del aparato reproductor (sobre todo masculino), calma la ansiedad, regula el pulso, alivia la depresión y previene ataques de pánico.
En arahi.es tenemos una amplia gama de aceites naturales que te ayudarán a introducirte en la agradable aromaterapia. Visita nuestra web y elige tu aroma preferido.
Fuente: https://mejorconsalud.com