Limpio tú, limpio el planeta.

La basura ha sido siempre todo aquello que ya no nos sirve para nada. Sin embargo, ese concepto ha cambiado mucho en los últimos años y ahora todos somos conscientes de que esa basura sí puede tener una utilidad, se puede reciclar.

Con motivo del taller que Arahí impartirá el próximo domingo en colaboración con Greenpeace, cuyo objetivo es concienciar de la importancia del reciclaje, queremos hacernos eco esta semana en nuestro blog de algunos consejos que Ecoinventos comparte en su web dentro de la “Guía para reciclar”.

Podríamos afirmar que una  mayoría de personas, a pesar de que no reciclen, sí sabrían identificar dónde depositar productos como el vidrio, plástico, papel y cartón, pilas… ¿Pero qué ocurre con otros tantos productos de uso diario que no sabemos cómo reciclar? A continuación os indicamos qué productos y dónde, generalmente dentro de los denominados “puntos limpios” (espacios que disponen de varios contenedores, donde hay que trasladar los residuos domésticos que por sus características no pueden mezclarse con el resto):

  • Aceite usado de vehículos: por su alto poder contaminante, necesitan un tratamiento especial y pueden utilizarse posteriormente como combustible.
  • Aceite usado de cocina: nunca se debe tirar al fregadero porque es muy difícil separarlo del agua y eso dificulta las tareas de las depuradoras. Una vez tratado se puede recuperar para fabricar biodiesel y jabones. De esto precisamente versará el taller que impartirá Arahí el domingo, sobre cómo fabricar jabón casero con aceite usado, aunque son otros muchos productos cosméticos los que pueden reutilizarse, como por ejemplo, sombras de ojos que ya no usamos, pueden servir para crear nuevos tonos de esmalte de uñas si vertemos esos polvos dentro; o las cremas protectoras del verano o hidratantes caducadas, son ideales para hidratar productos de piel como bolsos o calzado.
  • Baterías de coche y moto: son muy contaminantes porque llevan líquidos corrosivos. De ellos se puede aprovechar el plomo, níquel y cadmio.
  • Fluorescentes: contienen mercurio tóxico; por eso deben ser tratados por separado. De ellos se recupera el mercurio, aluminio y vidrio. Busqueda de puntos de recogida en España: http://www.ambilamp.es/recogida/puntos_de_recogida
  • Medicamentos: también se pueden depositar en las farmacias, Puntos SIGRE. Los que están caducados se eliminan de una forma controlada. Los que no se envían a países menos desarrollados o se destinan a personas necesitadas.

Por si aún no estás concienciado con la importancia de reciclar para cuidar nuestro planeta, para cuidarnos a nosotros mismos en definitiva, te dejamos este video donde podrás ver lo que tardan de degradarse muchos de los materiales que generamos y no reciclamos.

https://www.youtube.com/watch?time_continue=1&v=9N5l_-LD5dQ

Fuente: ecoinventos.com

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